Utilizar diferentes tipos de pantallas en nuestra vida diaria es algo que está completamente normalizado: empezamos el día mirando el móvil, trabajamos delante de la pantalla de un ordenador, nos distraemos echándole un vistazo a la tablet… Al final, esto deriva en un uso abusivo de las pantallas digitales, exponiendo nuestros ojos a la ya famosa luz azul, la cual puede provocar trastornos visuales.
Aunque hablamos de la luz azul en términos negativos, no toda es mala. ¿Quieres saber en qué te ayuda?
La luz azul
De toda la luz visible, la luz azul conforma un 25% del total y es emitida tanto por fuentes naturales (el sol) como por fuentes artificiales (dispositivos electrónicos y luz LED). Dentro de ella podemos encontrarnos dos tipos: la luz azul-turquesa y la luz azul-violeta.
La luz azul-turquesa es la que proviene del sol y ayuda a nuestro organismo en muchos sentidos, ya que interviene en nuestro reloj biológico. Algunos de sus beneficios son:
- Interviene en los ritmos circadianos. Estos cambios físicos, mentales y conductuales siguen un ciclo de 24 horas y responden a la luz y a la oscuridad, por lo que gestionan nuestros tiempos de sueño o nuestra temperatura corporal, entre otros.
- Interviene en el rendimiento y el aprendizaje, ayudándonos a procesar y memorizar la información de forma correcta.
- Ayuda a proteger nuestros ojos de la radiación solar.
- Ayuda a frenar la miopía.
Por el contrario, la luz azul-violeta puede poner en riesgo nuestra salud. ¿Sabes cuáles son sus efectos?
Efectos adversos de la luz azul
La luz azul-violeta proviene de fuentes artificiales. Es emitida por pantallas digitales o por LEDs y tiene una intensidad muy alta, por lo que resulta perjudicial para nuestra vista.
Nuestros ojos no están preparados para pasar tanto tiempo fijos en estas pantallas, algo que actualmente sucede. Por este motivo, pueden verse efectos tanto a corto como a largo plazo.
Efectos a corto plazo
Algunos problemas que podemos notar después de hacer uso de las pantallas digitales son la irritación ocular, el cansancio y pesadez en los ojos, la falta de concentración…
Efectos a largo plazo
- Pasar mucho tiempo expuestos a la luz azul-violeta puede provocar fatiga y estrés visual, causando que nuestros ojos se pongan rojos, se sequen o que, incluso, no dé dolor de cabeza.
- Además, puede alterar los ritmos circadianos, originando problemas de insomnio y falta de descanso, lo que afectará a nuestra productividad y ánimo.
- También puede provocar problemas visuales más importantes, como la formación de cataratas, dificultades para leer y enfocar o la DMAE (degeneración macular asociada con la edad), un trastorno grave y una de las principales causas de ceguera.
Cómo proteger nuestros ojos
Proteger los ojos de la luz azul no es nada complicado. Básicamente, se trataría de dejar de abusar de las pantallas. Esto no siempre es posible, por lo que te vamos a enseñar algunos métodos que pueden aplicar para reducir sus efectos.
- Lo principal es, si trabajamos con pantallas, estar bajo unas condiciones lumínicas óptimas, preferiblemente con fuentes de luz natural. Además, colocarnos a una distancia prudencial de las pantallas resulta esencial, siendo lo idóneo a 50cm de la pantalla del ordenador y a 35cm de la pantalla del móvil.
- Ajustar la luminosidad de las pantallas o limitarla mediante software (utilizando los modos de lectura), además de aplicar filtros, es recomendable para proteger los ojos.
- Descansar nuestros ojos por cada hora de trabajo también es importante. Sería recomendable hacerlo entre 5-15 minutos, fijando la vista a lo lejos y parpadeando para mantener el ojo hidratado. También podemos seguir la regla 20-20-20 (cada veinte minutos, mirar algún punto a veinte pies/seis metros durante veinte segundos) para descansar la vista.
- Y, por último, utilizar gafas con filtro para luz azul ayuda a reducir la cantidad de luz que llega a los ojos, evitando futuros problemas. Si ya eres usuarios/a de gafas, se pueden adaptar a tu graduación. Estas gafas son especialmente recomendables para trabajadores de oficina, estudiantes y otras personas que pasan mucho tiempo haciendo uso de pantallas digitales.
En nuestra óptica Fergo contamos con gafas de filtro para luz azul que te ayudarán a proteger tu vista. Consúltanos y te aconsejaremos cómo cuidar tus ojos para evitar complicaciones. ¡Contacta con nosotros!